Estad siempre alegres en el Señor
III Semana de Adviento
Estamos llamados a
vivir con alegría, a desbordar de gozo con el Señor, Él ha estado grande con
nosotros y por eso estamos alegres. Los cristianos tenemos que caracterizarnos
por la forma de vivir, por la forma de afrontar la vida y por nuestra alegría
en lo que hacemos y decimos.
Por eso no tememos, porque está presente nuestro salvador,
porque viene a sacarnos de nuestro pecado, de nuestra oscuridad, de nuestras
tinieblas, esa es nuestra bandera, y ese es el mensaje que se tiene que
trasmitir a todos los hombres del mundo.
Jesús vino al mundo
para enderezar lo torcido, tiene que haber un nosotros un deseo de renacer, de
querer ser mejores, de que nuestro comportamiento y nuestra actitud haga
construir una sociedad mucho más solidaria y mucho más justa. El mundo lo
formamos todas las personas, y todos somos hijos de Dios, todos llamados a
cumplir una misión que es la que salvar nuestra alma, una vez descubierto esto,
pongámonos a trabajar todos, cada uno en su sitio, en su lugar, nuestra propia
conversión que debe llevar además a la llamada al encuentro gozoso con el
Señor, porque hoy anunciamos que va a nacer un salvador, que es el Mesías. El Enviado viene a cumplir la
misión de poner orden a un mundo que se empeña en vivir al margen de Dios, que
no asume su condición de criatura, y por lo tanto al igual que Adán y Eva andan
perdidos, desorientados y avergonzados.
Que el Señor nos conozca por la generosidad y por la bondad,
que nada os angustie, que nada haga perder la calma, el Señor viene vestido de
majestad, a reinar el mundo en su trono que es un pesebre y el amor a los más
pobres.
JAVIER ABAD CHISMOL